Lo último
- El acuerdo comenzará con tres empresas locales, las que podrán gestionar 200 kg de residuos orgánicos y transformarlas en tierra para plantas y alimentos para animales del sector agrícola.
En un esfuerzo conjunto por fomentar la reutilización de residuos alimenticios y promover la economía circular en la región de El Salar de Atacama, las empresas SQM y ByBug dio inicio a un ambicioso proyecto de gestión de residuos orgánicos. Esta iniciativa medioambiental tiene como objetivo convertir los residuos orgánicos en alimentos para animales y fertilizante para plantas, contribuyendo así a un enfoque más sostenible de la gestión de residuos.
El proyecto se enfocará en la gestión de residuos orgánicos de tres establecimientos locales: el Restaurante Sol Inti, el Hotel Habitas Atacama y el Restaurante-Hotel Chiloé. Estos lugares se suman a la causa de la gestión responsable de residuos orgánicos, y José Retamal, propietario del Restaurante Sol Inti, lo destaca como una oportunidad que debió haberse aprovechado hace tiempo. “Hace mucho tiempo que se debió haber pensado en esto, gracias a Dios se dio la posibilidad y hay que aprovecharla y conocer a profundidad el proyecto”, comentó Retamal.
El sistema de tratamiento de residuos orgánicos que se implementará se caracteriza por ser rentable, sostenible y eficiente a nivel global. Su tecnología modular permite su implementación en diversas ubicaciones, brindando una solución versátil y amigable con el medio ambiente.
Javier Silva, Gerente de Sostenibilidad y Asuntos Comunitarios de SQM Salar, enfatiza que este proyecto se alinea con los objetivos de la compañía en Atacama La Grande. “Este convenio es parte del inicio de nuestro trabajo con los residuos orgánicos en la comuna de San Pedro de Atacama, en donde lo que buscamos es mirar con sostenibilidad, reutilizando y valorizando productos, para producir tierra para nuestras plantas y proteínas para alimentar a nuestros animales”, expresó Silva.
Las unidades modulares, que tendrán dimensiones de 12 metros de largo por 2,5 metros de ancho, se instalarán en el lugar y están diseñadas para tratar una amplia variedad de residuos orgánicos. Lo más importante es que estas unidades no generarán ningún tipo de olor, lo que garantiza la preservación del ecosistema local.
La construcción de este módulo está programada para comenzar en octubre, marcando el inicio de las pruebas y la implementación de esta innovadora metodología. Se espera que estas unidades tengan una capacidad de gestión de 200 kg de residuos orgánicos diarios, lo que contribuirá significativamente a reducir la huella de carbono en la comuna.
Rocío Espinosa, Gerenta de Operaciones y Fundadora de ByBug, destaca la importancia de esta alianza con SQM para la implementación del proyecto. “Marca un antes y un después. Nuestro sueño siempre fue trabajar con las comunidades y saber qué hacer con sus desechos alimenticios”, afirmó Espinosa.
Esta alianza entre SQM y ByBug tiene como objetivo principal crear conciencia sobre la importancia de valorizar los residuos orgánicos. Esto no solo contribuye a la preservación de la naturaleza, sino que también aborda la actual situación climática, promoviendo el desarrollo sostenible de las comunidades locales.
