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- Christian Sanhueza. CEO de Lan Polita, Consultora de Mercado y Minería
Como bien quedó de manifiesto hace algunos días con la realización en Chile de la semana Cesco y la Conferencia Mundial del Cobre, el sector minero nacional, tiene la gran oportunidad de ser protagonista y contribuir activamente al suministro de minerales necesarios que se están requiriendo para avanzar hacia la transición energética y mitigación de efectos del cambio climático de la mano de la descarbonización.
Además de contar con una desarrollada infraestructura minera que es reconocida globalmente y un historial de producción de clase mundial, Chile posee destacadas reservas geológicas y un recurso humano de primer nivel compuesto por directivos, profesionales y trabajadores.
A lo anterior, debemos añadir un actor que también es clave en este propósito. Me refiero a los proveedores mineros que impulsan la cadena de valor y aportan, a través de la innovación, las soluciones que la industria demanda.
Es decir, todo el potencial que tiene Chile en la actividad minera, sería imposible de poder desarrollar sin la contribución de proveedores de la calidad que hoy operan en nuestro país.
Ellos proveen las capacidades para escalar y desarrollar proyectos de forma rápida y efectiva en conjunto con las compañías mineras, por lo tanto, resulta esencial profundizar la generación de condiciones que propicien su crecimiento, especialmente ahora, que el mundo requiere más minerales para enfrentar el mencionado cambio climático.
Sin embargo, y en este contexto, tenemos el desafío de profundizar el respaldo hacia ellos, ya sea identificando de forma concreta, las nuevas oportunidades que se avecinan en el actual contexto global y las condiciones habilitantes para la sostenibilidad de estos socios estratégicos.
En esta línea, valoro la realización durante el próximo mes de junio, de una nueva versión de Exponor en Antofagasta, ya que este encuentro es una plataforma necesaria y de gran tradición, que impulsa la agenda pro crecimiento y fomenta nuevas oportunidades y negocios en el sector, especialmente para los proveedores.
Por otra parte, sigue siendo relevante la muy necesaria internacionalización de los proveedores hacia los destinos en nuestra región, Australia, Canadá, Norteamérica o el mundo. Siempre con la meta de aportar en la exportación de nuestro vasto conocimiento minero.
En definitiva, nuestro país tiene las condiciones necesarias para ser actor protagonista de la transición energética, pero en este desafío debemos incluir a los proveedores nacionales, tanto de regiones como de la capital, pues contribuyen a que la industria profundice los cambios tecnológicos requeridos y al mismo tiempo, les brindaremos una mano para acceder a nuevas oportunidades de negocios.
