El empate 2-2 de este lunes como local, en el cierre de la fecha 18 del torneo de Ascenso en el Carlos Dittborn, no le sirvió a San Marcos de Arica que con un triunfo quedaba solitario en la cima de la tabla de posiciones, y si ganaba Magallanes salía del fondo de la tabla. En resumen con el empate perdieron los dos rivales.
Y también perdió la hinchada local que sintió una puntada en el corazón cuando en los descuentos del segundo tiempo, cuando Los Bravos celebraban el 2-1, en la última jugada del encuentro fue un tiro libre muy venenoso de Tomás Aránguiz que empalmó en forma precisa Martín Araya (90+3′) para poner el 2-2 definitivo y cayó la noche en las graderías del estadio Carlos Dittborn, decretando prácticamente una derrota para ambas escuadras, con un empate que no le sirvió a Magallanes y ni a los muchachos de Cavalieri, el DT ariqueño que se desquitó con todas las sillas que encontró a su paso, rumbo a los camarines.
La sorpresa empezó cuando Magallanes abrió el marcador a los 9 minutos a través del uruguayo Facundo Peraza, tras aprovechar un tiro de esquina desde la derecha con un pivoteo en el primer palo, para definir sin resistencia rival.
No fue hasta el comienzo del segundo tiempo que San Marcos pudo darle vuelta el marcador a Magallanes y poner cierto orden. Augusto Barrios puso la igualdad en los 50′, mientras que ocho minutos después, Camilo Melivilú puso el 2-1 parcial.
Lo demás ya lo contamos. Otra frustración en casa y de las que duelen.
