- La planta desalinizadora de Minera Candelaria, pionera en Atacama, cumple 12 años operando de forma continua con una capacidad de 500 litros por segundo, permitiendo una producción 100% con agua de mar.
Minera Candelaria conmemora los 12 años de operación de su planta desalinizadora ubicada en el Puerto Punta Padrones, una infraestructura estratégica que le permite abastecer completamente sus procesos con agua de mar, reduciendo su huella hídrica y consolidando su modelo de minería responsable en la región de Atacama.
En mayo de 2013 se inauguró oficialmente la planta desalinizadora de Minera Candelaria, marcando un hito en la industria minera de Atacama. Doce años después, esta instalación continúa siendo una pieza central de la estrategia de sustentabilidad de la compañía, al permitir que el 100% del agua utilizada en sus procesos provenga del mar, evitando el uso de fuentes continentales.
Ubicada en el Puerto Punta Padrones de Caldera, la planta tiene una capacidad nominal de producción de 500 litros por segundo y utiliza tecnología de punta para convertir agua de mar en agua industrial. El proceso comienza con una captación pasiva a 27 metros de profundidad y 180 metros de la costa, seguido por una serie de etapas de tratamiento que incluyen flotación por aire disuelto (DAF), prefiltrado, ultrafiltrado, microfiltrado y ósmosis inversa. Finalmente, el agua es remineralizada antes de su uso en faena.
“El compromiso con la gestión hídrica sustentable ha sido un eje clave para Candelaria desde el inicio de esta operación”, señalaron desde la compañía. Esta política se complementa con una tasa de reutilización de aguas industriales superior al 90% y un consumo por tonelada de mineral procesado que está por debajo del promedio nacional en el rubro.
La infraestructura se extiende más allá de la planta misma. Un acueducto de 78 kilómetros y una línea de transmisión eléctrica permiten trasladar el agua desde la costa hasta el sector Bodega en Copiapó, desde donde se bombea otros 30 kilómetros hasta las operaciones ubicadas en Tierra Amarilla.
“La planta es parte esencial de nuestro compromiso con una minería segura, eficiente y en armonía con la comunidad”, reafirmó la empresa, en el marco de su Política de Minería Responsable.
Con esta operación, Minera Candelaria no solo reduce su impacto en las fuentes hídricas continentales, sino que refuerza su posicionamiento como una de las compañías pioneras en uso de agua de mar en minería en Chile.