- El sector de hidrocarburos en Bolivia enfrenta una crisis con el declive de la producción de gas natural y la incertidumbre sobre sus reservas, lo que podría llevar al país a dejar de exportar este recurso y tener que importarlo para cubrir su demanda interna.
El sector de hidrocarburos en Bolivia ha experimentado un fuerte declive en la producción de gas natural entre los años 2014 y 2022, de ser un gran exportador y a tener reservas que creían inagotables, llevó a una disminución significativa en las exportaciones de este recurso. Esta situación ha desplazado al sector de hidrocarburos de ser el principal rubro de las exportaciones a ocupar el tercer lugar, por debajo de la minería y los productos no tradicionales.
El presidente boliviano, Luis Arce, advirtió sobre la caída de las reservas de gas, aunque no se han proporcionado cifras específicas al respecto. Expertos en el campo señalan que, de mantenerse esta tendencia a la baja, Bolivia podría enfrentar la necesidad de importar gas en un futuro cercano para satisfacer su demanda interna.
La producción de gas ha disminuido de manera considerable, pasando de 49,9 trillones de metros cúbicos al día en 2014 a 40 mm3d en 2022, según datos oficiales. Esta reducción se ha visto reflejada también en las exportaciones de hidrocarburos, que han disminuido de 6.624 millones de dólares a 3.050 millones en el mismo período.
La falta de una certificación actualizada de las reservas de gas agrava la situación, ya que genera incertidumbre sobre la disponibilidad futura de este recurso. A pesar de los esfuerzos del Gobierno por reactivar el sector mediante proyectos exploratorios y la construcción de plantas de biodiésel, algunos expertos advierten que el repunte del sector podría tardar hasta 10 años en materializarse.