- BHP alcanzó en 2025 su mayor producción de cobre en Chile en 17 años, consolidando a Escondida y Spence como líderes globales del sector.
La compañía BHP cerró el año fiscal 2025 con una producción récord de cobre, destacando el rendimiento de sus operaciones en Chile, donde Escondida alcanzó su mayor nivel en 17 años y Spence logró su mejor resultado histórico. Este desempeño consolida al país como un actor esencial en la cadena de suministro global para la urbanización, digitalización y electrificación del planeta.
Con más de 2 millones de toneladas de cobre producidas a nivel global, BHP reportó un incremento del 8% respecto de 2024, según su revisión operativa publicada el 18 de julio de 2025. En este crecimiento, Chile fue protagonista: la mina Escondida, ubicada en la Región de Antofagasta, produjo 1.305 kt, gracias a un mayor throughput de concentradora, mejores recuperaciones y una ley de alimentación de 1,02%, muy por encima del 0,88% del año anterior.
“Escondida logró su mejor producción en 17 años, una muestra clara de nuestra fortaleza operacional y del potencial de Chile en la industria minera global”, destacó Mike Henry, CEO de BHP.
A su vez, Spence, también en la Región de Antofagasta, alcanzó una producción de 268 kt, su mayor cifra histórica, impulsada por una mejora en la ley de alimentación y un rendimiento estable en sus procesos de lixiviación y concentradora.
El documento detalla que BHP mantendrá su capex de exploración y desarrollo en torno a los US$11 mil millones en los próximos años fiscales (2026 y 2027), lo que reafirma su compromiso con la operación de largo plazo en la región.
Aunque se anticipa una leve baja en la producción de cobre para 2026 (estimada entre 1,8 y 2,0 Mt), el grupo señaló que esta se debe a la explotación de mineral con menor ley, manteniéndose dentro de los parámetros de planificación de sus activos en Chile.
Los resultados también se enmarcan en un contexto internacional favorable, con una creciente demanda de cobre por parte de los sectores de energías renovables, vehículos eléctricos e infraestructura digital, donde la participación chilena es estratégica.
