- Boston Metal introduce un método revolucionario para producir acero utilizando electricidad, eliminando emisiones y simplificando el proceso.
Boston Metal, empresa derivada del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), lanzó al mercado una innovadora tecnología que promete transformar la producción de acero. Este método, que utiliza electricidad como fuente principal de energía, elimina muchos de los pasos tradicionales en la fabricación de acero y tiene como único subproducto el oxígeno. Esta tecnología no solo representa un avance significativo en la eficiencia de la producción, sino que también tiene el potencial de reducir drásticamente el impacto ambiental de la industria siderúrgica.
El método desarrollado por Boston Metal se basa en la electrólisis de óxidos metálicos. A diferencia de los procesos convencionales que dependen de combustibles fósiles, la electrólisis utiliza una corriente eléctrica para separar los metales de sus óxidos. Este proceso simplifica significativamente la producción de acero, eliminando la necesidad de hornos de coque y altos hornos, que son fuentes importantes de emisiones de dióxido de carbono (CO2).
“Estamos ante un cambio de paradigma en la fabricación de acero”, afirma Tadeu Carneiro, CEO de Boston Metal. “Nuestro método no solo es más eficiente, sino que también tiene un impacto ambiental mucho menor. Liberamos oxígeno en lugar de CO2, lo que nos coloca en la vanguardia de la producción de acero sostenible”.
La tecnología de Boston Metal, conocida como electrólisis de óxidos fundidos (MOE, por sus siglas en inglés), ha sido objeto de investigación durante varios años. Los ingenieros y científicos del MIT han trabajado para optimizar este proceso y hacerlo viable a escala industrial. La electrólisis de óxidos fundidos permite producir acero de alta calidad utilizando electricidad de fuentes renovables, lo que podría revolucionar la industria siderúrgica y contribuir significativamente a la reducción de las emisiones globales de CO2.
La adopción de este método también podría tener implicaciones económicas importantes. Al reducir la dependencia de los combustibles fósiles y simplificar la cadena de suministro, los costos de producción podrían disminuir, lo que haría el acero más competitivo en el mercado global. Además, la producción descentralizada de acero podría reducir la necesidad de transporte a larga distancia, disminuyendo aún más las emisiones y costos asociados.
Sin embargo, la transición hacia este nuevo método no estará exenta de desafíos. La infraestructura actual de producción de acero está profundamente arraigada en métodos tradicionales, y la implementación a gran escala de la electrólisis de óxidos fundidos requerirá inversiones significativas. Además, la disponibilidad y el costo de la electricidad renovable serán factores cruciales para determinar la viabilidad económica del proceso.
Boston Metal ha recibido un respaldo considerable de inversores y del sector académico, lo que refleja la confianza en el potencial de esta tecnología. La empresa ha establecido varias asociaciones estratégicas y está trabajando en proyectos piloto para demostrar la eficacia y escalabilidad del proceso de electrólisis de óxidos fundidos.